Remedios de pueblo.

Hoy, mientras estaba sentado en mi santuario filosófico donde acostumbro a perderme en mis pensamientos (el bater para ser más explícitos) me ha dado por reflexionar sobre los remedios caseros que mis abuelos solían aplicarme para diversos malestares y me he caído en la conclusión de que mis abuelos no me tenían demasiado aprecio… Los latigazos y el potro de tortura no era nada en comparación.
A partir de ahí, me picó la curiosidad por como se divertían los abuelos de demás familiares de pueblo de otras personas y me he dedicado a recopilar los remedios más absurdos y estúpidos que jamás había escuchado; lo más sorprende es que algunos de estos realmente funcionan!.

Cuando tenia problemas de garganta, como por ejemplo irritación o tos y no podía dormir, mi abuelo se dedicaba a hacerme tragar toda clases de mezclas y pócimas de lo mas variopinto, por ejemplo, una cucharada de aceite con azúcar, miel, y más… Pero sin duda lo que mejor resultado dio fue su vasito de leche calentita con dos gotitas de whisky… Bien, con lo que para mi abuelo eran dos gotitas los camareros de hoy en día sirven un cubata, por supuesto yo dejaba de toser y de quejarme ipso facto, con solo 7 añitos quedaba profundamente dormido en cuestión de minutos.

Otro remedio de pueblo de los que he tenido noticias preguntándole a mi abuela es el siguiente: Cuando los niños contraían la solitaria (Parasito que se aloja en los intestinos), las abuelas llenaban un barreño con leche caliente y azúcar. Entonces, el paciente debía colocarse, desnudo, en cuclillas sobre el barreño de modo que, en teoría, la solitaria, atraída por la mezcla dulzona, debía asomar la cabeza (no os voy a decir por donde, lo dejare a vuestra capacidad de deducción) y en ese momento, la abuela, armada con unas tijeras, le cortaría la cabeza. Teniendo en cuenta el pulso y la precisión de las abuelas… Por esta práctica muchos Franciscos han pasado a llamarse Paca.

Un remedio muy conocido para las picaduras es el de orinar en un poco de tierra y untártelo en la picadura… Por poco higiénico que parezca, este remedio si que funciona ya que la orina contiene amoniaco, ingrediente que comparte con el famoso after bite; señores de marketing, deberían pensar en cambiar el eslogan ‘’ pique el insecto que te pique en la picadura te orines’’.

Pero sin duda lo que se lleva la palma son los remedios caseros para quitar el hipo:
-Darte un susto. (Esto no suele servir pero siempre es entretenido ver a uno de tus amigos haciendo el gilipollas.)
-Beber agua al revés. (Este si sirve, sobre todo por la ostia que te da tu madre cuando veas la que has liado con el agua.)
-Que alguien te escriba un número en la espalda y tu debes adivinarlo, si lo adivinas se te quita el hipo. (Y si no aciertas te devuelven el reintegro.)
-Beber 7 sorbos de agua seguidos. (Cuidado con no ahogarte con las tonterías.)
-Agarrar la lengua con el pulgar y el índice mediante un pañuelo y tirar ligeramente hacia fuera. (Aviso, hay gente que ha tenido que acudir al médico para deshacer el nudo; pero si lo consigues te convalida para realizar felaciones.)
-Mantener un trozo de hielo durante un minuto junto a la nuez. (No se si se te quitara el hipo, pero de la pulmonía no te salva nadie.)
-Tomar tres sorbos de agua. En el primero sorbo decir en voz alta: "Hipo de Dios, en el segundo: San Pedro me lo dio y en el tercero: Ya se me quitó".
-Hundir el dedo en la boca del estómago mientras se cuenta hasta sesenta. (Es una buena forma de entretenerse un rato.)
-Elaborar una infusión a base de una pizca de menta piperina, una pizca de toronjil y una taza de agua. Impregnar un terrón de azúcar en zumo de limón y disuélvalo en la boca si el hipo lo ha tomado de improviso. (Sazonar bien y servir en frio, un plato exquisito.)
-Oler un paño empapado en alcohol blanco. (Si no te has desmayado a lo mejor se te quita.)
-Comerse una cucharada de azúcar (Abstenerse diabéticos).
-Meterse a la boca un terrón de azúcar mojado en vinagre. (El hipo se va horrorizado por el asco, demasiado arriesgado para mi gusto).
-Uno que roza la superstición: cruzar los dedos índice y corazón de ambas manos antes de hipar por tercera vez.
-Partir un limón por la mitad y luego chupar un pedazo por unos minutos. Si desea incluso se puede comer una parte. (No funciona, pero la cara del paciente es descojonante.)
-Taparse los oídos con los dedos índices durante 20 segundos. (Vale, no se te quita pero por lo menos no lo oyes.)
-Apriete la palma de su mano con el pulgar de la otra bien fuerte. (Ojo, si empieza a sangrar afloja.)
-Esta solo funciona con bebes, colocar un hilo ROJO mojado en agua con azúcar en la frente del niño. (Por favor, llamen a protección de menores y búsquenle un buen hogar a ese niño.)
-Y por último, el no menos famoso remedio de aguantar la respiración. (Este funciona, porque si no respiras, te mueres y hasta la fecha no se conoce a ningún muerto con hipo.)